México D.F. El pasado 2 de Octubre dio inicio la exposición “La muerte: El espejo que no te engaña”, en el MUNAL (Museo Nacional de Arte) ubicado en el centro histórico de la Ciudad de México.
Esta exposición contiene pinturas y demás trabajos que datan desde el siglo XVI hasta el siglo XX y muestran el culto nacional hacia la muerte.
Está dividida en tres salas, la primera dedicada al tiempo virreinal, en que pintores, escritores y demás artistas se inspiraron en la muerte para plasmar sus obras. La segunda nos muestra la tragedia de aquellos niños inocentes que han fallecido y que para ser recordados y vistos como ángeles eran retratados en pinturas y fotografiados. El último cuarto está lleno de ánimo y costumbres; hacen de la muerte festividades mexicanas pintorescas, como calaveras dedicadas a los revolucionarios, sarcasmos políticos, los días dedicados a los muertos en el país y objetos hechos con esqueletos.
Hay trabajos de artistas como José Manuel Posada y su ya acostumbrada Catrina, y de artistas desconocidos; pero con estas obras se hace de la exposición un buen lugar para pasar el tiempo, aprender y conocer.
Martínez Monroy José Roberto, FES-Aragón-UNAM
Esta exposición contiene pinturas y demás trabajos que datan desde el siglo XVI hasta el siglo XX y muestran el culto nacional hacia la muerte.
Está dividida en tres salas, la primera dedicada al tiempo virreinal, en que pintores, escritores y demás artistas se inspiraron en la muerte para plasmar sus obras. La segunda nos muestra la tragedia de aquellos niños inocentes que han fallecido y que para ser recordados y vistos como ángeles eran retratados en pinturas y fotografiados. El último cuarto está lleno de ánimo y costumbres; hacen de la muerte festividades mexicanas pintorescas, como calaveras dedicadas a los revolucionarios, sarcasmos políticos, los días dedicados a los muertos en el país y objetos hechos con esqueletos.
Hay trabajos de artistas como José Manuel Posada y su ya acostumbrada Catrina, y de artistas desconocidos; pero con estas obras se hace de la exposición un buen lugar para pasar el tiempo, aprender y conocer.
Martínez Monroy José Roberto, FES-Aragón-UNAM
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