· Águeda González en vivo
Con una ejecución extraordinaria del clavecín interpretando música barroca, virreinal y contemporánea, Águeda González, demuestra una vez más el talento que la ha acompañado a lo largo de su trayectoria artística.
En el Museo Nacional de San Carlos, la artista deleitó al público, con melodías barrocas, entre ellas algunos preludios, invenciones y sinfonías, del Concierto italiano, del compositor Johann Sebastian Bach, "es uno de los artistas que me gusta interpretar en el clavecín", declaró luego de terminar su ejecución.
Entre breves explicaciones de la época barroca, la intérprete, continuó con una brillante demostración, de Pièces de Jean Philippe Rameau, con melodías como: La coulicam, La livri y La vézinet, con una gran agilidad ya que requieren una gran preparación, puesto que difieren de las de un piano convencional.
Posteriormente, Mario Federico Ibarra con Música para teatro II. Con una suite del Códice Saldivar, de Santiago Murcia Polanco de la época virreinal, amenizó con un conjunto de sonidos de tonos más alegres entre ellos ejecutó: tres minuets, cumbées, jácaras, y fandangos. Lo que demuestra el gran repertorio que la clavecinista abarca, ya que, no se estanca en un solo ritmo en las melodías, trata de diversificar en los tiempos, trasladándonos al pasado de rigurosa tonalidad cómo un preludio, y avanzando por el tiempo, dejándonos con música de tonalidad variable cómo lo es un fandango.
Por Eduardo Cerón, FES-Aragón-UNAM
Con una ejecución extraordinaria del clavecín interpretando música barroca, virreinal y contemporánea, Águeda González, demuestra una vez más el talento que la ha acompañado a lo largo de su trayectoria artística.
En el Museo Nacional de San Carlos, la artista deleitó al público, con melodías barrocas, entre ellas algunos preludios, invenciones y sinfonías, del Concierto italiano, del compositor Johann Sebastian Bach, "es uno de los artistas que me gusta interpretar en el clavecín", declaró luego de terminar su ejecución.
Entre breves explicaciones de la época barroca, la intérprete, continuó con una brillante demostración, de Pièces de Jean Philippe Rameau, con melodías como: La coulicam, La livri y La vézinet, con una gran agilidad ya que requieren una gran preparación, puesto que difieren de las de un piano convencional.
Posteriormente, Mario Federico Ibarra con Música para teatro II. Con una suite del Códice Saldivar, de Santiago Murcia Polanco de la época virreinal, amenizó con un conjunto de sonidos de tonos más alegres entre ellos ejecutó: tres minuets, cumbées, jácaras, y fandangos. Lo que demuestra el gran repertorio que la clavecinista abarca, ya que, no se estanca en un solo ritmo en las melodías, trata de diversificar en los tiempos, trasladándonos al pasado de rigurosa tonalidad cómo un preludio, y avanzando por el tiempo, dejándonos con música de tonalidad variable cómo lo es un fandango.
Por Eduardo Cerón, FES-Aragón-UNAM
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